Ladrones desvalijaron la casa de Brad Pitt mientras estaba de gira por la película “F1”
Fue el miércoles por la noche. La Policía todavía no pudo investigar a los atacantes.
La inseguridad golpeó en uno de los modernos barrios de lujo que tiene Los Ángeles y tocó a una estrella de Hollywood. Al menos tres hombres entraron a la mansión de Brad Pitt y robaron elementos de valor.
De acuerdo al informe policial que publicó la revista People, el robo fue a las 22.30 del miércoles, un día en el que la figura del cine estaba en Japón para promocionar la película F1 que protagoniza y se estrenó este jueves.
Cómo fue el robo en la casa de Brad Pitt
La información policial que sintetizó el medio estadounidense puntualizó que fueron tres los ladrones que “irrumpieron en la residencia por la ventana delantera, saquearon el lugar y luego huyeron con diversos objetos”.
Hasta el momento, los atacantes no fueron identificados y tampoco se sabe qué se llevaron de la mansión de Pitt. TMZ indicó, según fuentes policiales, que no pudieron determinar los artículos que robaron.
Ese medio, además, expone que luego del robo, la puerta de entrada de la casa quedó tapiada con láminas de madera contrachapada. Además, durante las últimas 24 horas hubo un gran movimiento de operarios que hicieron arreglos de seguridad alrededor de la propiedad.
El asalto se produjo en medio de una serie de robos similares a otras casas de famosos en Los Ángeles que se incrementaron desde hace un tiempo.
Las casas de Nicole Kidman y Keith Urban; la de Tom Hanks y Rita Wilson; la del artista Marshmello; y la del actor Austin Butler fueron atacadas en los últimos meses, con diferente ferocidad.
Incluso, la vivienda de Jennifer Aniston en Bel Air, fue el escenario de un insólito accidente por el cual un conductor se estrelló contra la puerta de entrada de la casa de la actriz.
Brad Pitt está en plena gira promocional de F1, el film en el que encarna a un piloto experimentado que está retirado de esa categoría, pero que vuelve cuando un viejo amigo se lo pide.
Dirigida por Joseph Kosinski, el film tuvo un altísimo presupuesto -más de 200 millones de dólares- y fue producido por el corredor Lewis Hamilton que gestionó todo para que los realizadores pudieran grabar escenas durante los Grandes Premios de la Fórmula 1.